Para nadie que sea incluso ajeno a la tecnología le resulta extraño que la informática y su ingeniería – ciencia o arte – cometa constantemente errores: Filtraciones de seguridad e intromisiones en Twitter, problemas de seguridad, permisiología y usabilidad en Facebook y más recientemente el muy famoso y conocido problema con la aplicación de mapas de Apple en su versión IOS6. Y aunque éstos son los casos conocidos, también existen a nivel de usuario no final –consumidor– en la industria, con los difíciles, imposibles y utópicos acuerdos alcanzados entre clientes y empresas.
El mundo del software ha crecido desproporcionalmente en ésta era de la información y mientras las exigencias son cada vez mayores, los desarrolladores son seres humanos que forman grupos humanos y que usan herramientas tecnológicas hechas por humanos, que sí, que comenten errores y que fallan a la hora de hacer proyectos.
Si bien para ciertos proyectos en donde encaja la perspectiva de elaboración ágil, los desarrolladores han sido preparados para emprenderlas, no es así el caso de los clientes: Se esta a años luz de diferencia y el GAP existente en ambos mundos es cada vez mayor.
Si por un lado los desarrolladores de software deben mejorar – es ésta una ciencia aún joven que avanza muy veloz –, los usuarios también deberían hacerlo, empezando por entender que las cosas no salen de la noche a la mañana, que estimar no es predecir, y que estamos condenados a más desorden que orden en el mundo.
Y así como los usuarios consumidores también los usuarios empresarios deberían de mejorar; rara vez se puede apreciar que un programa respetable de MBA contenga parte de procesos ágiles, innovación y futuro, todo parece ser el mismo material de hace treinta años, es como desempolvar un viejo libro del PMI(Project Managament Institute): no importa el año, el contenido es el mismo pero con distinto índice.¿Es ésta la educación que reciben los empresarios del futuro? ¿Es éste el único enfoque?
Aparentemente, el principal reto en la actualidad de un ingeniero de software pasa por reducir el GAP entre lo que la industria del desarrollo sabe dar y la industria de la demanda quiere, luchando inútilmente contra las leyes universales: todos estamos de acuerdo en que hasta el propio universo no se generó de forma rápida, planificada y perfecta: nuestra existencia es la prueba de ello[1].
¿Es probable que esta situación cambie?, ¿quién sabe? criticar sigue siendo hoy en día la postura más fácil de tomar.
REFERENCIAS
[1] Historia del tiempo, de Stephen Hawking.