Contrario a lo que ha sucedido a nivel mundial, donde la crisis económica pareciera no haberle hecho «NOCAUT» a las tecnologías de información y las empresas de este sector, Venezuela nuevamente escapa de esta situación y es otra vez una lamentable excepción.
Por un lado se encuentran las empresas grandes extranjeras, empresas que sobreviven por su contundencia de madurez, y que sus estrategias radican en campañas de marketing y ventas de productos desarrollados en otros países, y aprovechando la irrevocable tendencia consumista de los usuarios venezolanos – pese a la crisis económica – . En otro extremo, ubicamos a la «gigante» de las telecomunicaciones CANTV, intervenida por el gobierno y estatizada bajo «la nueva empresa socialista», que no es más que un grupo de recién aprovechados jugando a brindar servicio de telecomunicaciones al país, y que como cualquier otra institución manejada por el gobierno Venezolano su plan estratégico (si han realizado alguno), pasa por cumplir los deseos y caprichos del presidente y sus allegados, y pasa además por descuidar con cada día que pasa la calidad de servicio e innovación, apostando por el retraso y la anarquía.
En otro contexto, existen diversas empresas pequeñas, formadas por jóvenes emprendedores que buscan agregar valor al mundo que nos rodea con nuevos métodos y proposiciones. Lamentablemente son empresas sentenciadas a quedarse estancadas, a planear para sobrevivir más que para progresar. A buscar desesperadamente cualquier proyecto, sin un plan estratégico de consolidación a futuro, porque es imposible hacerlo.
En medio, se puede ubicar a las empresas medianas, que durante años han luchado para llegar a donde están y que poco a poco ven como se reducen las oportunidades, se aumentan las deudas y se ven obligadas a cerrar.
Tres aspectos se desprenden de este primer análisis: No hay espacio para las nuevas empresas, las empresas medias consolidadas se ven en la necesidad de quiebra, y por último: No hay producción de tecnología en Venezuela, la oportunidad de negocio existe solo si vendes productos realizados fuera del país (y si tienes contactos con el gobierno que faciliten los divisas).
Haciendo un ejercicio de reflexión, se pueden encontrar algunas causas que parecieran explicar el problema. En primer lugar las empresas del sector privado, quienes están llenas de necesidades y problemas a resolver con la tecnología, se encuentran ahogadas con la situación económica actual y con el constante acorralamiento con las políticas públicas ofrecidas por el gobierno. De esta forma, cualquier análisis macroeconómico a simple vista revela números rojos y hasta un 90% de riesgo de inversión en el país, quizá del mismo rojo con el que ha estado teñida Venezuela durante estos últimos años de ineficiencia y cultura mediocre de gestión. Esto da ha lugar, obligatoriamente al rechazo de cualquier proyecto de inversión ofrecido, por más exitoso que seguramente pudiera ser en cualquier otra parte del planeta tierra.
La administración pública, fuente de trabajo y proyectos en otros países, en Venezuela es simplemente sinónimo de MEDIOCRIDAD. Comenzando por que el ministro encargado de estos asuntos, tiene estudios en cualquier otra cosa menos en tecnología de información, pasando por que a ningún ente gubernamental le interesa emprender proyectos de este tipo, quizá por la curiosa razón de que para cada directivo de cargos públicos en este país la palabra automatizar es sinónimo de AUDITAR, y auditar precisamente no es lo que buscan – supongo que imaginarán el por qué -; y culminando con la lamentablemente cultura derrochadora y cómoda del venezolano, donde se trabaja por horas de ocupación de puestos y no por objetivos de proyecto y visión estratégica de organización.
La perspectiva a futuro para esta área no promete nada en Venezuela, de hecho promete más inconvenientes y trabas, ejemplo de ello la ley que pretenden aprobar próximamente en la Asamblea Nacional sobre la regulación de Internet y las telecomunicaciones, al mejor estilo dictatorial y totalitario de China. ¿Qué nos depara el futuro de las TI en Venezuela? ¿Hay alguno?… ¿Que está sucediendo con las TI en Venezuela?
Excelente articulo que refleja la gran problematica tecnologica que existe en Venezuela. Un caso para la fecha actual, el cable submarino a Cuba, algo ilogico cuando la plataforma tecnologica de internet de Cantv esta en gran inclinacion en picada, un servicio con muchos problemas por la gran demanda de ciudadanos por el servicio, cuello de botella para los que ya disponen de este, y a parte un costo millonario por proveer de este servicio a otro pais.
Caracas puede salvarse un poco en conservar aun algo de ambiente tecnologico laboral por ser la capital pero otras regiones del pais, el area IT es casi nula.